Si bien la plaga que más comúnmente que se quiere ahuyentar y finalmente erradicar es la de palomas, la correcta combinación e implementación de métodos y productos para control de aves cubre todas las especies y casi todas las situaciones, logrando la eliminación o reducción de la cantidad de aves a niveles en que ya no causan molestias.
– Redes o mallas, suelen ser muy eficaces alrededor de zonas específicas o tapando los huecos por los que los pájaros entran en los edificios. Sirven para impedir el acceso de las aves a los lugares que interesa proteger.
– Pinches anti posado, fabricados con alambre de acero zincado o acero inoxidable, con 1 metro de largo, 18 cm de ancho y 10 cm de altura, evitan que los pájaros se posen en puntos concretos. No son efectivos en lugares donde las aves anidan.
– Repelentes audibles, con reproducciones del sonido de depredadores o de alarma de la propia especie que queremos ahuyentar. Han resultado muy eficaces en cultivos y espacios abiertos. Los sonidos pueden llegar a molestar a los residentes vecinos y no alcanzan una efectividad del 100% con algunas especies.
– Repelentes de ondas complejas, generan ondas de radio en frecuencias variables que afectan el sistema nervioso de los pájaros causando irritabilidad y trastornando el sueño. Esto produce estrés que los ahuyenta en poco tiempo y previene la recolonización.
– Erradicadores ultrasónicos, molestan a las aves provocándoles estrés e incomodidad.
– Disuasivos visuales, son métodos de distracción y desorientación como material reflectante, globos y siluetas de depredadores.
– Gel repelente de aves, está indicado en edificios de valor histórico, monumentos y otras edificaciones donde deba cuidarse la fachada o la estética.
– Repelentes químicos, recomendado para lugares de posado que deban ser transitados o de fácil acceso.
– Bloqueadores de acceso, utilizados en situaciones en que, por la forma y dimensiones del espacio, colocar redes es complicado o donde se transita frecuentemente.
–Trampas, para captura con posterior liberación en áreas abiertas alejadas. Es un buen método que a veces se utiliza luego de la instalación de redes y pinches para evitar que las aves deambulen por la zona, acelerando su reubicación en lugares donde puedan vivir sin perjudicar a las personas.
– Inhibidores de vuelo, son ideales para veredas y patios de comida. Consisten en tanzas de nylon transparente instaladas de forma tal que las aves las toquen durante el vuelo asustándose.
– Hilos anti posado, fabricados con acero inoxidable forrado en nylon, con soportes y resortes de acero inoxidable. Constituyen una superficie inestable para el posado de pájaros pequeños o medianos.