Los erradicadores electrónicos de ondas complejas crean una red electrónica que impide a las palomas y otras aves permanecer en el lugar.
Se utilizan de a grupos, los equipos emiten ondas que se potencias unas con otras.
Las ondas complejas actúan sobre el sistema nervioso de las aves.
Las torna irascibles, modificando los patrones de sueño y vigilia, impidiendo la alimentación, desorientándolas y por tanto impidiendo la permanencia en el lugar.